Medios argentinos denuncian que barristas liberados de la U desataron “cacería” contra hinchas de Independiente

22-08-2025

La ciudad de Avellaneda se transformó en un campo de batalla tras la liberación de barristas de Universidad de Chile. Hinchas chilenos protagonizaron violentos ataques contra seguidores de Independiente y hasta un móvil de televisión, generando máxima alerta en las autoridades argentinas.

La tensión en Avellaneda escaló a niveles críticos luego de que barristas de Universidad de Chile, que habían sido detenidos tras los incidentes en el duelo de Copa Libertadores y posteriormente liberados, desataran una ola de violencia en la ciudad. Según reportó Doble Amarilla, los hinchas chilenos iniciaron una verdadera “cacería” contra simpatizantes de Independiente, provocando destrozos y sembrando el pánico en distintos sectores.


La situación se volvió tan grave que el colegio del club de Avellaneda activó un protocolo de seguridad para resguardar a los alumnos. “Nos vimos obligados a reforzar las medidas internas para garantizar que los niños estuvieran a salvo”, explicaron desde la institución educativa.


Uno de los episodios más violentos ocurrió cuando los barristas chilenos atacaron un móvil de América TV que estaba cubriendo los disturbios. El hecho quedó registrado en video y se viralizó en redes sociales. “Fue un momento de mucha desesperación, estábamos haciendo nuestro trabajo y de pronto nos vimos rodeados”, relató uno de los periodistas afectados.


En paralelo, se informó que barristas de Independiente comenzaron a organizarse para tomar represalias, lo que aumenta el riesgo de choques aún más violentos. “Hay un clima de vendetta en la ciudad, lo que genera un riesgo altísimo de enfrentamientos”, advirtió un cronista de TyC Sports.


El caos ha puesto en alerta máxima a las autoridades locales, que reforzaron la presencia policial en distintos puntos de Avellaneda. Sin embargo, la violencia parece no tener freno. Tras los incidentes en la Copa Libertadores que dejaron un alto número de detenidos, la liberación de varios hinchas chilenos no apaciguó los ánimos, sino que desató una nueva escalada que mantiene a la ciudad al borde de una batalla campal.

Diego Valdes
Colaborador